‘Antes del paraíso’, de Pedro Ugarte (Páginas de Espuma)

‘Autoficción’, de Juan Carlos Márquez (Aristas Martínez)
6 enero, 2022
Crítica de Quitamiedos en La Opinión de Málaga
6 enero, 2022
Show all
antes-del-paraiso-pedro-ugarte

Parentescos oxidados

(Crítica publicada en el diario La Verdad de Murcia)

¿Qué hacer el día en que los muros de la familia que nos protegen y las torres que señalan al cielo con el rigor de su fe, muestren las grietas de su decadencia y amenacen con caernos encima? Partiendo del espacio esencial que ocupan los parentescos próximos e indagando en los efectos que los actos provocan sobre nuestros seres queridos, Pedro Ugarte construye en Antes del Paraíso ocho cuentos admirables de diversa hondura y extensión. 

El autor mantiene intacto el impecable pulso narrativo que ya alcanzara en su aclamado volumen anterior, Nuestra historia, de hecho, la continuidad de ambos libros es tal que sugiere la unidad propia de un díptico, ya incluso desde el diseño de sus cubiertas. Si bien, en estos nuevos relatos Ugarte orienta más la hoja del bisturí hacia la delgada fibra de los vínculos familiares, invitando al lector a reconocerse con frecuencia en diálogos, discusiones o reflexiones meditadas sujetas a temas tan atávicos como trascendentes. Antes del Paraíso propone historias donde la tensión blande su filo sobre las relaciones entre padres e hijos, los pactos no escritos que exigen la aceptación silenciosa de una falsa nobleza, la presión de cumplir con un destino gravado tanto por lo social como por lo genético, la rutina que erosiona la pasión, las fisuras azarosas que quiebran la amistad o las expectativas no alcanzadas que pesan como lápidas sobre las espaldas de los vástagos. La maestría del autor vasco logra pronto convertirnos en sus confidentes y nos acompaña con aparente facilidad hasta reflexiones insondables sobre la necesidad de aceptarnos como individuos, de asumir que vagamos por una Tierra colmada de demasiadas sendas como para poder recorrerlas todas y satisfacer a todos aquellos que esperan algo de nosotros. A través de los ojos de Jorge, personaje casi omnipresente en la narrativa de Ugarte, el lector es testigo de vivencias cotidianas y precisos recortes de vidas que podrían ser la suya, la de ese amigo que a veces lo visita por sorpresa, la de los sospechosos vecinos de la urbanización estival, la del tipo que acaba de entrar en el concesionario, la de Linares, la Demetrio o la de Márquez, el padre de las gemelas. 

Afinando un poco, yendo más allá del gozo de la lectura, tal vez estos relatos puedan ayudar a discernir entre lo que existe de propio y de heredado en el interior de nuestras almas mortales. Ugarte propone una literatura honesta, sin trucos ni atajos argumentales, capaces de conectar con una realidad que trasciende lo generacional. Ocho cuentos que se leen como se respira, atravesados por una luz tan reconocible y familiar que parece idéntica a la que baña la realidad, con sus brillos y sus sombras.