Reseña publicada en La Verdad de Murcia en diciembre de 2018
Pedro Ugarte reúne en Lecturas pendientes una constelación de breves ensayos que orbitan en torno a la literatura. Pero, en realidad, la literatura es la justificación que sirve al escritor vasco para hablarnos de diversos aspectos de la vida. Ugarte nos presenta una selección de notas que parecen haber sido rescatadas de diversos diarios y que no precisan ser hilvanadas. Encontramos reflexiones sobre lecturas realizadas (en las que nos presenta a sus autores predilectos y aprovecha para rescatar a otros que considera injustamente olvidados) que se alternan con vivencias más o menos amplias o explícitas sobre su experiencia con el mundo editorial, acerca de los sinsabores y los retos morales que presenta el oficio del escritor, bellas anécdotas sobre la amistad o confidencias honestas sobre su intimidad personal o familiar. Así, el lector verá cómo Ugarte le abre desde las primeras páginas las puertas de su biblioteca, para de pronto encontrarse en el cómodo sofá del salón o sentado a la mesa con él; escuchando, dialogando, aprendiendo, disintiendo. Pero con independencia del grado de acuerdo ideológico o conceptual que compartamos en ciertos aspectos, la permanente sensación de hospitalidad y refugio que sentimos es mérito del estilo impecable, siempre educado, franco e inteligente, del autor. Un libro que celebra la existencia eterna del hecho literario y se lamenta, al mismo tiempo, de que nuestra finitud no nos permita disfrutar de esa eternidad.