“Confirmar un buen debut nunca es fácil; en la música se suele comentar que existe algo parecido a una maldición del segundo disco. En el caso de la literatura, la benevolencia con la que se suelen recibir todas las óperas primas desaparece con el segundo libro, en el que lectores y críticos esperan un paso adelante de ese autor que nos llamó la atención con su primera referencia. Este sería el caso del escritor murciano Trifón Abad, que sorprendió a muchos con su debut: Que la ciudad se acabe de pronto (2018), que fue finalista del prestigioso premio Setenil. Afortunadamente para los seguidores de Abad, su segundo libro confirma su buen hacer como creador de relatos breves.
Y es que si en algo destacan los once cuentos de Quitamiedos es en el buen oficio que muestra el autor al escribir narraciones que pasan de lo insólito a lo cotidiano, se adentran a veces en lo fantástico y siempre acaban ofreciendo a los lectores relatos de una gran solidez estructural. Trifón Abad maneja a la perfección el ritmo adecuado para cada relato, ofreciendo a veces finales sorprendentes y en otras conclusiones abiertas que tratan de interrogar al receptor sobre los derroteros que seguirá la historia que queda en suspenso”.